Desde Tinaquillo, Edo Cojedes – Venezuela, un municipio con 110K personas, también nos sumamos vía internet a través de la aplicación APP, nuestra página web y las redes sociales, para llegar a todo el mundo hispano que Dios permita que lleguemos. Lo hacemos con temor a Dios y rogamos al padre que sea con su sabiduría, transmitiendo alabanzas y adoración para exaltar su santo nombre, tañendo o llevando esta ovación con música hermosa en labios de hombres y mujeres justificados por la sangre del cordero. Nuestra programación, va dirigida a impartir ética y formación personal, familiar y social partiendo de la moral y principios que Dios le ha dejado en la Biblia a la humanidad como sugerencia mientras transite por esta tierra, en labios de hombres y mujeres llamados del cuerpo de Cristo por Dios a ejercer algún servicio o ministerio para edificar a la Iglesia, con la finalidad de poner su granito de arena para alcanzar la unidad de una sola Fe y el conocimiento del Hijo de Dios. Recta es la palabra de Dios, por ella fueron hechos los cielos y sus ejércitos, Él ama justicia y juicio, Él dijo y fue hecho, Él mando y existió, sus consejos y pensamientos permanecerán para siempre por todas las generaciones, por lo cual bendecido es el hombre y la nación cuyo Dios es Jehová. Desde sus moradas en los cielos, Jehová ve y tiene la mirada puesta en cada uno de los hijos de los hombres, Él formo el corazón de cada uno de ellos y está atento a las obras de cada uno de los moradores de la tierra, por eso, desde esta radio y ministerio estamos seguros que nada de lo que hagamos ni de las fuerzas que ejerzamos, así como la multitud de los ejércitos de ningún rey o fuerzas de muchos caballos y jinetes, podríamos hacer para completar la obra que está en su sola potestad, por su misericordia y que solo corresponde a Dios, LA OBRA DE SALVACION Y VIDA ETERNA. Es por ello que Nos limitamos en anunciar y repetir sus dichos que ya están en la Biblia, confiados en su gran bondad que ha guardado para los que le temen y esperan en Dios para arrancar sus vidas de la muerte y llevarlos a vida, a través de la fe en Jesucristo.